El Consultorio Sexual de Magdalena

Sed bienvenidos a nuestro rincón íntimo donde encontrarás comprensión y apoyo para todos esos problemillas y dudas que nos han surgido a todos en algún momento de nuestras azarosas vidas.

La pareja ideal.

Thursday, April 27, 2006

Hola Magdalena, soy el típico gilipollas que se gana la vida montado sobre una rueda y haciendo malabarismos con unas naranjas y un cigarro en la boca. El caso es que me he enamorado de una yonqui que se gana la vida haciendo malabarismos para no caerse mientras aguanta su jeringuilla y un porro en la boca. Creo que tenemos mucho en común. No sé cómo acercarme a ella y presentarme. Me da mucho palo. Todas las noches duerme en un banco al lado del mío. ¿Es un buen momento para presentarme? Fabián.

Hola Fabián, creo reconocer en ti al típico gilipollas que se cree habilidoso por levantar una mesa con la barbilla. Seguro que eso te ayuda en muchas situaciones. Vamos, que estás en un bar, no sabes qué decir y levantas una mesa con tu barbilla mientras recibes los falsos aplausos de los amigos.

Bueno, que me enrollo. El caso es que está bien que asumas tu posición en este mundo y aspires a conquistar a la drogata. Lo primero que tienes que averiguar es qué momento es el más oportuno: cuando no tenga el mono. Sólo cuando la veas con una goma elástica presionando su brazo y la boca abierta con una babilla cayendo por el lado... puedes aproximarte. En segundo lugar dirígete a ella con educación: "qué pasa tron" puede ser una buena forma de comunicación entre vosotros. Después dile: "rula un porrito". Si lo comparte contigo... Enhorabuena!, habrás encontrado a tu compañera perfecta. Ya podréis atracar juntos en el Día y ayudaros a vomitar sobre sus cajeras (si es que no lo han hecho antes ellas sobre vosotros).

Un saludo!
Magdalena Vermús.

Transporter

Monday, April 17, 2006

Hola Magdalena, soy una viciosilla cualquiera y te escribo para comentarte mi problema: resulta que mi novio tiene un golf (el muchacho es un golferas, como yo le digo), y a mí me pone cachondísima chuparle la polla cuando vamos en coche, sobre todo en los semáforos. Mi problema es que, al precio que está la gasolina, mi chico cada vez coge menos el coche, y a mí no me da el mismo morbo chupársela en otro sitio. ¿Qué puedo hacer?
Gracias, Magdalena.
Jenifer.


Hola, Jenifer. Me sigue sorprendiendo la falta de imaginación que le echáis a las cosas... Verás que tu problema, no es tal. Las soluciones son muy variadas y sencillas: por ejemplo, dado que practicarle a tu novio una felación en bicicleta seguramente no tendrá para ti el mismo encanto, siempre os quedará el transporte público. Procurad colocaros discretamente en la parte de atrás del bus, o de lo contrario es posible que provoquéis un accidente debido a las masturbaciones compulsivas del conductor mientras os mira por el retrovisor.
Otra opción es buscarte a otro novio / ligue / rollo / follador ocasional, que tenga más pasta que tu chico actual, y al que no le importe gastarse el dinero en gasolina. ¿Has probado alguna vez a chupar una polla en un Porsche? Te lo recomiendo. Y ya sabes, esto es como los petisuís: dos mejor que uno.
Con mucho cariño,
Magdalena.

Esquiador

Thursday, April 13, 2006

De: Esquiador@y...com

jakñdsf jkdf apm r ajsdk añjd asmd ajssjqwe fmdkl ñpkxf as d fj añsj
¿al ajs dj aksjrue jas hfa sdc?


Por favor, intente escribir sin guantes.

Vicente Inocente

Sunday, April 02, 2006

Hola Magdalena. No tengo ningún remordimiento. Acabo de asesinar a una persona. Al menos eso creo. No se mueve. No respira. Huele mal. Le llamo y ni contesta. Creo que está muerto. No, espera se mueve. No, falsa alarma. Te cuento como empezó todo: yo iba a echar la basura al contenedor, como siempre, y un hombre se me quedó mirando el culo. Al principio no le di importancia... bueno, sí, sí se la dí. Le pregunté qué miraba y antes de darme cuenta estaba metiendo su cuerpo en el maletero. El caso es que al subirlo a mi piso empezó a excitarme la idea de resarcirme. ¡Se había muerto sin apenas haberme desahogado! Pues eso, le bajé lentamente los calzoncillos, saqué mi pene y se lo introduje por el ano. Me gustó bastante, pero ahora no sé qué hacer. Me he enamorado. Pero está muerto, creo. ¿Cómo puedo deshacer este trágico conflicto? Estoy enamorado de un muerto. No lo puedo sacar a cenar por ahí. Hoy es mi cumpleaños y tenía pensado sacarlo por ahí. Pero me da cosa. No se tiene solo. ¿Qué hago?


Hola Vicente. No te preocupes por la gente. ¿Qué hay de malo en enamorarte de una persona a la que has matado? No es muy recomendable, pero tampoco veo yo nada malo. Lo mismo decían de la relación con los peces y mira ahora, es de lo más normal. La gente se acaba acostumbrando. Al principio te costará soportar alguna mirada. Pero ya se irá. Con lo único que tienes que tener cuidado es con manterner el cuerpo frío en el congelador. Ah, y si le sacas por ahí a cenar, procura no juntar mucho su frente a las velas, no se vaya a quemar el flequillo. ¡¡Y a disfrutar, parejita!!
Magdalena.